“Tengo un asiento, tercera fila, justo en el medio”, manifestó April Ryan en una de varias entrevistas con C-SPAN (en inglés) en 2015. “Cuando comencé estaba en la sexta fila”.
Ryan es corresponsal en la Casa Blanca para American Urban Radio Networks [Redes de Radios Urbanas Estadounidenses], un medio de comunicación minoritario dirigido a una audiencia urbana afroestadounidense. La reportera ha estado grabando su programa diario, “The White House Report” [Informe de la Casa Blanca], desde 1997, y aunque su paso desde la sexta fila de la sala de prensa de la Casa Blanca a la tercera fila parezca ser menor, simboliza la creciente importancia de los medios de comunicación especializados en el cuerpo de prensa de la Casa Blanca.
“No somos las ABC, ni las CBS o las CNN”, manifestó Ryan. “Somos las redes de radio estadounidenses… los Telemundos… los diarios LGBT… las emisoras cristianas. Somos todo tipo de cosas diferentes que no son necesariamente parte de esas ilustres dos primeras filas”. De todas maneras, ella está más cerca de esas ilustres dos primeras filas que de aquellos que compiten por obtener atención al fondo.
Mientras los medios de comunicación tradicionales quizás hagan preguntas acerca de ISIL o Bengasi, Ryan pregunta acerca de las relaciones entre las comunidades y la policía o sobre un nuevo impuesto laboral que afecta a las minorías.
“Ellos se pueden enfocar en una cosa y uno se enfoca en otras, y eso es lo bueno de tener a la gente en la sala haciendo preguntas” desde diferentes perspectivas, manifestó Ryan.
Una perspectiva particular no siempre es una ventaja. Ryan dice que los funcionarios de la Casa Blanca muchas veces temen darle la palabra en las sesiones informativas porque no saben qué preguntas va a hacer o si tendrán una buena respuesta preparada.
De todas maneras, la audiencia definida de Ryan la convierte en la periodista a la cual acudir cuando el presidente necesita comunicarse con el público afroestadounidense. Muchas veces, la crónica de una historia que realiza Ryan obtiene más cobertura en medios de comunicación principales como CNN, el New York Times o el Washington Post.
Orden de colocación de los representantes de los diferentes
medios en la sala de prensa de la Casa Blanca
El asiento de un periodista en la sala de prensa importa. Cuanto más atrás se siente el periodista, menos probable es que se le invite a hacer una pregunta. A menudo, las sesiones informativas son la única oportunidad que tienen los periodistas de obtener declaraciones oficiales de las autoridades de la Casa Blanca acerca de las noticias del día. Si a Ryan no se le permite realizar una pregunta en la sesión informativa, pierde la oportunidad de obtener la perspectiva de la Casa Blanca respecto a un tema del que esté informando.
Se debe destacar que la Casa Blanca no tiene demasiado control sobre el grupo de periodistas. La Oficina de Prensa de la Casa Blanca coordina las credenciales con el Servicio Secreto de Estados Unidos, pero son los propios medios de comunicación los que determinan qué periodistas asistirán a las sesiones informativas y la Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca es la que decide dónde se sientan.
Con las limitaciones económicas que obligan a algunas publicaciones a reducir su cobertura y la creciente popularidad de las redes sociales que lleva a nuevas organizaciones a la sala, el cuerpo de prensa de la Casa Blanca ha cambiado en la última década. En marzo de 2015, medios relativamente nuevos como Al Jazeera y BuzzFeed obtuvieron asientos en la quinta y séptima fila respectivamente.
Surge la pregunta, ¿cuánto tiempo pasará antes de que estas organizaciones, con sus particulares públicos, se unan a Ryan en la tercera fila?