El secretario de Estado John Kerry tiene un mensaje claro para aquellos que no creen que el cambio climático está ocurriendo: Están ignorando la realidad, a riesgo de su propia seguridad.
El aumento de las temperaturas, del nivel del mar y de las sequías no solo afecta al medio ambiente y amenaza las condiciones de vida, sino que exacerba los conflictos sociales y políticos, de lo cual se aprovechan ávidamente los extremistas. “El cambio climático es un multiplicador de amenazas”, declaró el 10 de noviembre (en inglés) en Norfolk, Virginia.
Estados Unidos se unirá a otros países en París el 30 de noviembre durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, también llamada XXI Conferencia de las Partes (COP 21). Kerry manifestó que tenemos a nuestro alcance un acuerdo internacional “ambicioso, duradero e inclusivo” para reducir las emisiones de carbono que provocan el cambio climático.
“El tipo de acuerdo en el que estamos trabajando demostrará que los líderes mundiales finalmente comprenden el alcance del desafío que enfrentamos”, dijo.
Kerry afirmó que Estados Unidos ha reducido sus emisiones totales de carbono más que cualquier otro país. Ahora emite menos que lo que emitió en dos décadas y ha aumentado drásticamente su uso de energía renovable. Después de que Estados Unidos y China anunciaran conjuntamente sus compromisos de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, más de 150 países, lo que representa el 90 por ciento de las emanaciones mundiales, han anunciado sus propios objetivos en materia de emisiones, declaró.
Estados Unidos trabaja con los países en desarrollo para ayudarlos a dejar de utilizar fuentes de energía baratas que emiten elevados niveles de carbono y a tornarse más resistentes a los efectos del cambio climático, según informó Kerry.
“Todavía tenemos tiempo para llevar a cabo la transición a una economía mundial de energía limpia y encaminar al mundo hacia una vía mucho más segura y mucho más sostenible”, afirmó.
“Tenemos una responsabilidad moral de proteger el futuro de nuestra nación y de nuestro mundo. Esto es nuestra función. Es nuestro deber”, manifestó. “Tenemos que hacer esto bien”.
Los países que participarán en la COP 21 establecieron el objetivo de llegar a un acuerdo por el que se limiten las emisiones de gases de efecto invernadero lo suficiente como para mantener el calentamiento global por debajo de los 2 º centígrados.
Un acuerdo climático mundial “no será la varita mágica que eliminará la amenaza que representa el cambio climático”, dijo. “Pero la verdad es que no la eliminaremos sin un acuerdo en París”.
Todos pueden ayudar al ejercer la presión adecuada sobre los líderes para alcanzar este objetivo, aseguró. Y como individuos, hay muchas otras formas de ayudar.