Antes que la mortífera epidemia del ébola azotara Guinea en 2014, en el hospital de Dubréka nacían muchos bebés cada mes. Pero durante la crisis de salud la maternidad se vació, y menos de diez mujeres optaron por dar a luz en ese lugar.
Ahora la maternidad reconstruida está otra vez llena, gracias a los esfuerzos de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional y otras entidades asociadas, para mejorar el sistema de salud en Ghana y restaurar la confianza del público.
“En los seis meses transcurridos hemos tenido más de 500 nacimientos”, dijo el doctor Bakayoko Sekou, director del hospital, en una entrevista telefónica.
Dubréka, una población de 8.000 personas, ahora tiene los servicios de emergencia con que antes no contaba. La sala de maternidad y pediátrica han sido renovadas y mejor equipadas, incluyendo aire acondicionado. “Hemos recibido mucha capacitación, que antes no podíamos tener”, dijo Sekou. “La confianza ha sido restaurada poco a poco”.
Guinea y África Occidental nunca habían experimentado un estallido de ébola antes de su primer caso en un pueblo alejado. El único paciente con ébola que llegó al hospital de Dubréka contagió a otras cuatro personas. Rápidamente el miedo y la desconfianza se expandieron, a medida que la cantidad de gente enferma aumentaba en otros lugares del país. En Guinea hubo más de 3.300 casos confirmados, antes de que la epidemia fuera frenada en 2016.

“El país está hoy invirtiendo más en el sistema de salud”, dijo Sekou. “La totalidad de Guinea no estaba familiarizada con el ébola. Fue algo nuevo para nosotros. Realmente necesitábamos el apoyo de asociados de afuera, que nos ayudaran a superar esa epidemia”.
USAID ha financiado la renovación de hospitales y clínicas en todo el país. Un asociado, la Capacidad Colaborativa para Comunicación en la Salud, trabajó con el ministerio de Salud de Guinea en una campaña para los medios de masas (en inglés) estableciendo un riguroso sistema de acreditación que concedió a los mejores hospitales el premio “Estrella de Oro”.
“Nosotros fuimos uno de los cinco hospitales de la región en ganar una Estrella de Oro”, dijo Sekou.
Otro asociado, el Cuerpo Médico Internacional, una organización humanitaria con sede en Estados Unidos, trabajó con funcionarios de Guinea en iniciativas para la promoción de la salud, para mejorar la atención en torno a las enfermedades infecciosas.
“El país está aplicando las lecciones que aprendió en la respuesta a la epidemia de ébola, para estar mejor preparados, con mejor capacidad de respuesta para controlar mejor cualquier enfermedad que pueda convertirse en epidemia, incluyendo el ébola, en el futuro”, dijo el doctor Rigo Fraterne Muhayangabo, un administrador en el Cuerpo Médico Internacional.
Conozca mejor este cambio en este blog (en inglés) que Mariama Keita, de USAID, escribió luego de su reciente visita al hospital de Dubréka.