La promesa del presidente Obama de aceptar 10.000 refugiados sirios este año próximo no fue una sorpresa. Estados Unidos reasienta más refugiados que todas las demás naciones conjuntamente: casi 3 millones desde 1975.
Muchas comunidades estadounidenses tienen un historial de acoger a personas desplazadas de otros países. Algunos están intensificando este comportamiento pidiendo a refugiados sirios que se unan a sus comunidades.
Los alcaldes de las ciudades que ponen la alfombra de bienvenida explicaron su decisión en términos similares. “Esto habla de nuestros valores más profundos como estadounidenses”, dijo la alcaldesa de Baltimore, Stephanie Rawlings-Blake.
Es “lo que hay que hacer”, añadió el alcalde de San Luis, Francis Slay. San Luis ha ofrecido siempre refugio a aquellos que lo necesitan. En la década de 1970, fueron los vietnamitas. En la década de 1990, los bosnios. Hoy en día, son los sirios.
Las ciudades y estados con las comunidades estadounidenses de origen sirio y árabe establecidas pueden surgir como destinos principales.
“Mucha gente … nos dijo que en Michigan hay gran cantidad de árabes y es una buena zona donde ir”, dijo el refugiado Mahmoud Karaz (en inglés). “Es un poco más fácil para nosotros”.
Un portavoz del Servicio de Refugiados de Texas dijo a un reportero en una entrevista (en inglés) que la fuerte economía de su estado es una de las razones por la que los sirios podrían ir allí. Otra es una creciente comunidad siria “que se está creando en Dallas en la actualidad y que va a beneficiar a los refugiados sirios que vienen después. Van a tener un vecino donde pueden ir y hablar en el mismo idioma y tienen ese vínculo común”.
Slay resume la respuesta de su ciudad a la última crisis de refugiados. “Estamos preparados para manejar esto”, dijo. “Este esfuerzo tiene el pleno apoyo del gobierno de la ciudad.”