Los ejecutivos de negocios están conectando las prácticas medioambientales con las ganancias, impulsados en parte por los deseos de los consumidores.
En 2014, un estudio realizado por Nielsen, una agencia de encuestas de mercado, reportó que la mayoría de los consumidores en 60 países pagarían más por productos o servicios de empresas comprometidas con buenas acciones sociales y medioambientales.
Las compañías dicen que los recientes cambios en los procesos de fabricación y en los productos ayudan al medioambiente y benefician sus balances.
Existe un claro beneficio en relaciones públicas. Cada vez más, las compañías de cotización pública informan sobre sus emisiones de carbono, ahorro de agua o tasas de reciclaje. Hace dos décadas, menos de 30 empresas en el mundo informaban sobre dichas medidas medioambientales, pero ahora más de 6.000 compañías producen informes de sostenibilidad, según un reciente estudio de la escuela de negocios de la Universidad de Harvard.
A continuación, cuatro industrias que están redefiniendo la expresión “los negocios de siempre”:
Banca
Históricamente, el color “verde” con el cual se asocian las instituciones financieras estadounidenses era el del dinero (el dinero estadounidense es de color verde). Por supuesto, eso no cambiará, pero hay un nuevo significado para el color verde hoy en día, a medida que la “banca sostenible” gana terreno.
“Para nosotros, los préstamos basados en principios sostenibles son una mejor apuesta”, dijo Stephanie Meade, directora en el New Resource Bank en San Francisco. New Resource no tiene casi ningún préstamo moroso. “A largo plazo [nuestros clientes] tienen probabilidad de continuar siéndolo, no están tomando decisiones a corto plazo solamente para tener lucro”.
Los grandes bancos están cambiando sus prioridades también. Citigroup Inc. Prometió recientemente invertir 100.000 millones de dólares en proyectos medioambientalmente sostenibles. La compañía espera reducir las emisiones de gases de efecto invernadero mediante la financiación de proyectos de transporte limpio y funciones de ahorro de energía en la vivienda.

“Nuestro trabajo es financiar las cosas buenas, y eso incluye la energía eólica, la energía solar, y una amplia gama de nuevas tecnologías”, explicó Mike Eckhart, uno de los directores de Citigroup. Cree que esto solo puede beneficiar la rentabilidad. “No es una oportunidad de miles de millones de dólares”, precisó Eckhart. “Es, ya, hoy mismo, una oportunidad de cientos de miles de millones”.
Ventas minoristas
Los vendedores minoristas que intentan reducir sus huellas de carbono comienzan por sus cadenas de proveedores, las cuales representan hasta tres cuartas partes de las emisiones de gases de efecto invernadero de una compañía, según la Agencia de Protección Medioambiental.
Algunos vendedores minoristas hacen y transportan sus propios productos, y pueden así ajustar fácilmente los procesos. Los que no lo hacen, influyen en sus proveedores y transportistas. (Los vendedores minoristas aplican códigos medioambientales de conducta a sus proveedores y a veces dejan de hacer negocios con ellos si ignoran estos).
Para ayudar a que sus proveedores de artículos sean ecológicos, Nike Inc. se asocia con Bluesign, una empresa que mantiene un índice de productos químicos y tintes no perjudiciales para el medioambiente. Nike invierte también en DyeCoo Textile Systems, que fueron pioneros de una forma de teñir tejidos sin agua que Nike espera utilizar en todas sus fábricas. El proceso eliminará la descarga de sustancias químicas, reducirá el consumo de energía y mejorará la saturación del color.

Wal-Mart Stores Inc. puso llantas que ahorran combustible en sus camiones y mejoró la aerodinámica de los mismos. Capacita a los conductores sobre cómo manejar de modo eficiente. En 2013, los camiones de Wal-Mart repartieron 181 millones más de cajas, a la vez que condujeron 269.000 kilómetros menos en comparación con el año anterior. Eso redujo las emisiones de carbono en un grado equivalente a eliminar 5.000 automóviles de las carreteras, y redujo los gastos en 65 millones de dólares.
Fabricación pesada
Los fabricantes de Estados Unidos, tradicionalmente vistos como excesivamente dependientes de los recursos naturales, están introduciendo medidas medioambientales en las fábricas y reduciendo los costos en el proceso.
También están hablando de ello. Hace dos décadas, pocas empresas industriales producían informes de sostenibilidad. Hoy, casi el 90 por ciento de los principales fabricantes de Estados Unidos publican tales informes anuales, detallando sus iniciativas y metas medioambientales.
Caterpillar Inc., el mayor fabricante de maquinaria de construcción del mundo, reportó un aumento en su reutilización de materiales de desecho. En 2014, la compañía recicló el 90 por ciento de su material de desecho para sus productos. La cantidad reciclada, 695 millones de kilogramos, equivale a 5.072 excavadoras.
“Ha habido presión para que las grandes compañías intenten hacer más con menos”, explicó John Cangany, gerente en Ford Motor Company. Ford está reduciendo la cantidad de agua que utiliza dentro de las torres de enfriamiento y en las líneas de producción que lavan piezas. En 15 años, la compañía ahorró más de 41.600 millones de litros, lo suficiente para llenar 16.000 piscinas olímpicas.

Muchas piezas no metálicas para automóviles hoy en día contienen más desechos reciclados postconsumo. El tejido de los asientos en el modelo Ford Focus contiene el equivalente de 22 botellas de agua recicladas. Ford calcula que dichas innovaciones le ahorran 10 millones de dólares anuales solamente en América del Norte.
El fabricante de automóviles usa también más elementos naturales. Recientemente se ha unido a Heinz para utilizar la piel de los tomates que sobra de la producción de cátsup para desarrollar plásticos biológicos, comentó Cangany.
Alta tecnología
A medida que fluctúan las temperaturas y los océanos se enfrentan a la incertidumbre, la gente en todo el mundo toma más “conciencia ecológica” y los innovadores de alta tecnología obtienen ganancias, produciendo de todo, desde automóviles eléctricos a productos hechos de materiales reciclados.
En Estados Unidos, el 71 por ciento de los consumidores considera el impacto medioambiental de sus compras, según la firma de mercadotecnia Cone Communications.

Nest Labs Inc. ha aprovechado la tendencia. Esta nueva empresa del Valle del Silicio, que fabrica un termostato “inteligente”, fue comprada recientemente por Google por 3.200 millones de dólares.
Los dispositivos que reducen el consumo de energía generarán 22.000 millones de dólares en ingresos mundiales para 2023, según Navigant Research, una firma de consultoría tecnológica.
PlotWatt, en Carolina del Norte, desarrolló software para analizar la energía utilizada por los electrodomésticos, y recientemente ha aumentado su segmento del mercado entre empresas comerciales. Los datos del sistema, que muestran mejores modos y horas para usar los electrodomésticos, son valiosos para los propietarios de cadenas de restaurantes, quienes dependen de congeladores industriales y otros electrodomésticos grandes.
Los restaurantes pueden reducir sus facturas energéticas en un 11 a un 15 por ciento, el equivalente de vender “muchas más hamburguesas con queso”, señaló Luke Fishback, cofundador de PlotWatt.
Algunos clientes se registran simplemente para ahorrar dinero, dijo. Pero “están ayudando al medioambiente aunque esa no sea su intención”.
Ilustraciones de Doug Thompson