La diversidad de Estados Unidos influye en el fútbol y en las tradiciones de la Copa Mundial

Mujer y hombre envueltos en la bandera de Estados Unidos y los colores de la bandera, el hombre lleva un sombrero en la cabeza con forma de queso (Depto. de Estado de EE. UU./Paul Wulfsberg)
Los diplomáticos estadounidenses Mariya Ilyas y Joshua Baker, vistos animando a Estados Unidos contra Inglaterra el 25 de noviembre, son algunos de los muchos aficionados estadounidenses que asisten al Mundial de Catar. (Depto. de Estado de EE. UU./Paul Wulfsberg)

Decenas de miles de aficionados estadounidenses al fútbol viajaron a Catar para asistir a la Copa Mundial de 2022. Pero las formas en que celebran el deporte más popular del mundo, incluso el equipo al que animan, son tan diversas como su país de origen, dijeron los aficionados.

“Anoche conocimos a hinchas iraníes de Ohio. Conocimos a aficionados mexicanos de Texas”, declaró Chase Kania, de Seattle, a ShareAmerica el 29 de noviembre en Doha. “Todo eso habla de nuestra cultura única”.

Fotografía de una mujer sonriente con grandes gafas azules de montura cuadrada (Depto. de Estado de EE. UU./Paul Wulfsberg)
Tramaine Curtis, estadounidense que da clases en Catar, era una simple aficionada ocasional al fútbol hasta la Copa del Mundo. (Depto. de Estado de EE. UU./Paul Wulfsberg)

Kania es uno de los 50.000 aficionados estadounidenses al fútbol que se calcula (en inglés) que asisten a la Copa del Mundo que se celebra del 20 de noviembre al 18 de diciembre en Doha. Hasta el 27 de noviembre, los aficionados estadounidenses representaban el 7 % de los visitantes (en inglés) al torneo, el tercer contingente más numeroso, por detrás de Arabia Saudí y la India, según informes de prensa.

Aunque la popularidad del fútbol en Estados Unidos se ha disparado en las últimas décadas, los aficionados estadounidenses afirman que la cultura de este deporte se inspira en gran medida en las tradiciones de otros países donde el fútbol (o soccer) es desde hace tiempo uno de los principales pasatiempos nacionales.

“Tenemos un cántico alemán, uno del norte de Europa, y uno de América del Sur”, dice Kania sobre los aficionados al fútbol de Seattle, su ciudad natal. Pero “lo hacemos de una manera exclusivamente estadounidense”.

Para Kania, adoptar, e incluso tomar prestadas, las tradiciones de los aficionados de otros países es algo natural. Dado que Estados Unidos es conocido como un crisol por su mezcla de culturas, dice Kania, “es normal que nuestra cultura futbolística no sea diferente”.

Shawn Allen, que atribuye a su crecimiento en un barrio mayoritariamente hispano del sur de California el haber fomentado su amor por el fútbol, dice que algunos aficionados estadounidenses, como los recién llegados a este deporte, son más reservados que sus homólogos internacionales.

“Probablemente nos queda mucho por hacer para ser buenos aficionados al fútbol”, dijo Allen a ShareAmerica el 29 de noviembre, mientras viajaba en autobús hacia el partido de Estados Unidos contra Irán con los bulliciosos seguidores del equipo iraní. “Podríamos trabajar en nuestros cánticos”.

Un hombre sostiene una bandera estadounidense envuelto en otra bandera estadounidense (Foto cedida por Mariya Ilyas)
Ilyas Hussain, de Virginia, voló con su familia a Catar para animar a Estados Unidos en el Mundial. (Foto cedida por Mariya Ilyas)

La selección estadounidense, cuyos jugadores son tan diversos como sus seguidores, derrotó a Irán por 1 a 0 antes de caer eliminada en octavos de final por 3 a 1 ante Holanda el 3 de diciembre.

La selección nacional masculina de fútbol de Estados Unidos (USMNT) cuenta con el delantero Jesús Ferreira, nacido en Colombia, y el defensa Sergiño Dest, nacido en Holanda, así como con jugadores cuyas familias proceden de países como El Salvador, Japón y Liberia. “La diversidad de este equipo es la diversidad de Estados Unidos”, declaró Gregg Berhalter, seleccionador de la USMNT, al diario The Washington Post.

Mientras los aficionados estadounidenses se enorgullecen en Doha de las diversas influencias del fútbol de Estados Unidos, la juventud de la selección masculina hace que los estadounidenses sean optimistas de cara a futuros torneos. El equipo estadounidense es el segundo más joven de los 32 (en inglés) que participan en la Copa Mundial, según los informes de prensa.

Aficionado de fútbol estadounidense vestido de rojo, blanco y azul con la cara pintada sosteniendo la bandera estadounidense (Depto. de Estado de EE. UU./Paul Wulfsberg)
Tyler Kirchner, ex entrenador de fútbol de una escuela secundaria de Nebraska, y otros aficionados estadounidenses afirman que la selección masculina de Estados Unidos podría aspirar a ganar el Mundial de 2026. (Depto. de Estado de EE. UU./Paul Wulfsberg)

“Nos va a ir bien este año, pero dentro de cuatro será realmente emocionante”, dijo Tyler Kirchner, ex entrenador de fútbol de Nebraska, que ahora presta servicio en el ejército estadounidense.

Kania también tiene buenas perspectivas para la selección estadounidense en 2026, cuando Estados Unidos, Canadá y México organicen conjuntamente la Copa Mundial. “Estamos recuperando terreno muy rápidamente”, afirmó Kania. “Cuando organicemos el Mundial… lo ganaremos”.