El arte y la vanguardia siempre han ido de la mano. En la actualidad, las universidades en Estados Unidos los están llevando a un nuevo nivel con artes y oficios, conservación de museos y programas de artes digitales que impulsan los límites de la tecnología y la expresión.
Modernización de las artes y oficios
Cuando se trata de soplado de vidrio, cerámica y ebanistería, pueden rehusarse a adaptar la tecnología por deferencia a “las formas antiguas” de preservar el pasado. Pero no en el Centro de Oficios de Appalachia, un campo secundario de la Universidad Tecnológica de Tennessee, en Cookeville (Tennessee).
Los estudiantes utilizan programas de diseño asistidos por computadora, impresoras 3D y telares computarizados para preservar y promover los tesoros de esa región montañosa, dijo Jeff Adams, director saliente del centro.
El centro enseña nuevas maneras de aplicar habilidades. Trabajando conjuntamente en un proyecto que se lleva a cabo en el África subsahariana, los estudiantes de ingeniería diseñan sistemas de filtración de agua, mientras que los estudiantes de cerámica fabrican dispositivos para filtrar el agua con arcilla.
“Se trata de lo que quieren hacer con las habilidades que han aprendido aquí, no simplemente de producir cosas para la venta”, expresó Adams.
Conservando más que arte
La Universidad Estatal de Nuevo México, la institución pública más antigua de educación terciaria en el estado, ofrece un título de primer grado universitario en conservación de museos desde 2005.
El interés en la conservación de obras de arte posiblemente esté relacionado con la popularidad de las ciencias forenses en programas de televisión como CSI: Crime Scene Investigation, dice la directora Silvia Marinas-Feliner.
Además, siempre hay demanda para la conservación. “Los objetos se deterioran, especialmente ante desastres naturales, y necesitan ser preservados”, expresó.
Una de sus exalumnas, Lyndy Bush, trabaja en el Museo Nacional de Historia Natural del Instituto Smithsoniano, en Washington. “Estoy conservando especies botánicas que fueron dañadas [por el Huracán Sandy], mientras estaban cedidas en préstamo”, explicó Bush.
“La idea de una carrera profesional relacionada con las artes que incorpora ciencia y habilidades es lo que me hizo enamorarme de este campo”.
Cortometrajes animados y otras artes digitales
Cada vez más estudiantes están siendo atraídos a las artes digitales, que incluye la animación, el desarrollo de videojuegos, el diseño gráfico y los efectos visuales.
Anne Yang es una estudiante de animación en la Escuela de Artes Visuales de Nueva York, que ha adquirido renombre como uno de los programas de artes digitales de primera categoría en el país.
Su educación le ha brindado una valiosísima capacitación práctica. Al final de su penúltimo año de estudio, colaboró con siete estudiantes en la filmación de un cortometraje animado, Fright Shift, que trata sobre un cazador de fantasmas que le teme a los fantasmas. “Los estudiantes generalmente no adquieren esa experiencia”, expresó Yang.
En su último año de estudio, utilizó sus destrezas para producir una filmación para su tesis llamada Broken Wand que obtuvo el segundo lugar en la categoría de animación en los Premios Universitarios de Televisión (College Television Awards).
¿Qué hace que el Departamento de Artes Computarizadas, Animación Computarizada y Efectos Visuales sea tan atractivo? “Ofrecemos un programa que solo contrata a profesionales hábiles para formar parte del cuerpo académico, que tiene el máximo rigor académico y que permite que los estudiantes sobresalgan concentrándose en la práctica de ser un artista durante cada uno de los cuatro años”, dijo John McIntosh, jefe del departamento.
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La autora de este artículo es la redactora independiente Karen Calabria. Contribuyó el redactor Mark Trainer.