La libertad de prensa en Crimea se ha deteriorado progresivamente durante la ocupación rusa desde marzo de 2014.
El 1 de abril, las autoridades rusas cerraron todos los medios de comunicación en idioma tártaro en Crimea, excepto uno. Además, agentes del servicio de seguridad de Rusia han realizado una serie de redadas, interrogatorios y detenciones contra periodistas independientes en Crimea:
- El 13 de marzo, agentes del servicio de seguridad ruso allanaron (en inglés) los hogares de los padres de Natalya Kokorina y Anna Andriyevskaya, ambas trabajadoras del Centro para el Periodismo Investigativo en Crimea. El centro es un grupo periodístico independiente que se vio forzado a trasladarse a la capital de Ucrania, Kiev, tras la ocupación rusa.
- El mismo día, agentes detuvieron a Kokorina y la interrogaron durante más de seis horas antes de liberarla.
- Las autoridades rusas también presentaron cargos criminales ese día contra Andriyevskaya en conexión con artículos que se alegaba que escribió pidiendo el fin de la ocupación rusa.
- El 8 de abril, agentes interrogaron a Anna Shaidurova, exredactora y periodista también en el Centro para el Periodismo Investigativo, durante tres horas, en relación con el caso criminal presentado contra Andriyevskaya.
- El 9 de abril, agentes rusos detuvieron a Tatyana Guchakova, cofundadora y redactora jefa del portal BlackSeaNews, tras registrar su apartamento en Yalta durante 10 horas e incautar toda la tecnología informática que encontraron en su hogar. Los agentes también detuvieron al exjefe de Guchakova, Andriy Klymenko.
Los actos represores de Rusia contra los medios de comunicación independientes de Crimea han sido condenados ampliamente. Dunja Mijatović, de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa, representante de la libertad de los medios de comunicación, calificó el arresto de Kokorina (en inglés) de ser “un recordatorio de la práctica continuada de las autoridades de facto en Crimea para intimidar y perseguir a los representantes de los medios de comunicación independientes por razón de su trabajo”.
La secretaria de Estado adjunta de Estados Unidos Victoria Nuland indicó (en inglés) que bajo la ocupación rusa, los abusos de los derechos humanos en Crimea “son la norma, no la excepción, para muchos grupos en riesgo”, incluidos los periodistas.
Resumiendo el estado del periodismo en Crimea hoy en día, Daniel Baer, representante de Estados Unidos ante la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa, señaló que los arrestos y el acoso (en inglés) por parte de las autoridades rusas “han dejado a la península prácticamente sin medios de comunicación ucranianos o independientes”.
Para más información sobre las consecuencias de las acciones de Rusia en Ucrania siga #UnitedforUkraine (en inglés).