Washington está a 13 horas detrás de Seúl, pero la capital de Estados Unidos está en la vanguardia de un fenómeno mundial relacionada con la cultura popular coreana.
Hogar de la tercera comunidad de origen coreano más grande en Estados Unidos, luego de Los Ángeles y Nueva York, Washington es una ciudad cuyos residentes escuchan música pop coreana, comen barbacoas coreanas y hacen fila bajo la lluvia por ver bailes coreanos.

A principios de mayo, como ha ocurrido en los diez últimos años, el Centro Cultural Coreano (parte de la embajada de Corea en Washington) abrió sus puertas a los visitantes, como parte de una “Gira por las embajadas del mundo” que se celebra en la ciudad. Los invitados fueron atendidos con comidas, música, arte digital y actuaciones folklóricas.
La música popular coreana, conocida comúnmente como “K-Pop”, una fusión de la música popular occidental con elementos tradicionales coreanos y efectos audiovisuales, era un gran atractivo para muchos en la multitud de ese día.

“Es raro encontrar una actuación musical de K-Pop en mi estado”, dijo Vaishali Kashyap, de 29 años, que hizo el viaje a Washington desde su casa en Raleigh, Carolina del Norte, para participar en una casa abierta. “Soy admiradora de las telenovelas coreanas, y de la música, desde que estaba en el colegio”, dijo ella.
El centro coreano ofrece una “academia” de K-Pop de seis semanas, cada verano, en la que los participantes trabajan con entrenadores profesionales de danza y canto de Corea.

El área de Washington también tiene muchos restaurantes coreanos dedicados a la barbacoa, muchos de los cuales asan directamente sus carnes en la mesa del comedor. La escena está aumentando, con espectáculos coreanos disponibles y nuevos restaurantes que abren todos los años.
La cultura coreana se “ha convertido en parte de la cultura global y Corea tiene una única pasión creativa que los hace destacar”, dijo Adam Wojciechowicz, del Centro Cultural Coreano.
Y ello es especialmente cierto en Washington.