Una vez por semana médicos y enfermeras de Namibia se conectan virtualmente con expertos médicos de Estados Unidos para recibir una capacitación actualizada sobre el cuidado de los pacientes con VIH y SIDA.
Namibia es uno de los 23 países, a lo ancho de varios continentes, que participan en un programa de telemedicina de Estados Unidos por medio de videoconferencias que se denomina “Proyecto ECHO” (Extension for Community Healthcare Outcomes), en un acrónimo que resume la descripción en inglés de “Extensión de resultados de cuidados de salud en las comunidades”.
El contacto semanal vía Internet no ofrece diagnósticos ni recomienda tratamientos a los pacientes. Más bien los encargados de la salud en Namibia adquieren conocimientos y el apoyo que necesitan para atender a los 80.000 pacientes que viven allí con VIH. Los Centros de Estados Unidos para el Control y Prevención de Enfermedades manejan el programa con apoyo del Plan de Emergencia del Presidente para el Alivio del SIDA (PEPFAR).
“Hemos invertido en mejores condiciones de salud y oportunidades en todo el mundo a través de programas como PEPFAR, que financia el alivio del SIDA”, dijo el presidente Trump en su discurso antes las Naciones Unidas, en septiembre.

El proyecto de telemedicina es particularmente de mucha ayuda para los médicos profesionales en las áreas rurales y poco atendidas, donde podría faltar la información más reciente. Hasta hace poco, por ejemplo, Namibia no tenía una facultad de medicina establecida.
Los resultados son impresionantes. Hoy, más del 85 por ciento de las personas que viven con VIH en Namibia conoce su situación. Más del 87 por ciento de todos ellos “responden apropiadamente al tratamiento, dijo en un vídeo (en inglés) el doctor Simon Agolory en el que explica el proyecto en Namibia.
Una vez que los participantes reciben la capacitación virtual y el material educativo por medio del Proyecto ECHO pueden compartir su conocimiento con sus colegas.
El proyecto fue originalmente elaborado por la Universidad de Nuevo México para promover la calidad del cuidado de la salud en Estados Unidos. Actualmente tiene potencial para mejorar los esfuerzos mundiales para controlar la epidemia del VIH, dijeron los expertos en la publicación médica “The Lancet”: “Este modelo también ayuda a los países a fortalecer sus propios sistemas de salud, lo que hace que el mundo sea un lugar más seguro para todos”, escribieron.
El 1 de diciembre se conmemora el Día Mundial del SIDA