“Me gustaría que todas las partes se escucharan unas a otras”, dijo el presidente Obama en España en respuesta a la pregunta de un reportero sobre las recientes muertes violentas de dos afroestadounidenses y de cinco oficiales de policía en Estados Unidos.
Pronunció declaraciones (en inglés) el 10 de julio, luego de la fatal matanza de dos hombres afroestadounidenses por la policía, en incidentes separados ocurridos en Falcon Heights (Minnesota), y Baton Rouge (Louisiana), lo cual fue seguido de la matanza de cinco oficiales de policía por un asesino en Dallas.
El presidente instó al respeto y al autocontrol por parte de los estadounidenses enfurecidos por la matanza de hombres negros por la policía, pero también urgió a los encargados de aplicar la ley de atender con seriedad los reclamos de intolerancia hacia las minorías.
Obama afirmó que la mayor parte de los oficiales de policía de Estados Unidos cumplen una buena tarea, y que la retórica que los retrata haciendo lo contrario favorece muy poco al apoyo para eliminar los favoritismos raciales en el sistema de justicia criminal. El presidente hablará en un servicio plurireligioso que se realizará el 12 de julio en Dallas en memoria de los oficiales muertos.
Renovar el llamado al servicio policial comunitario
En un mensaje por Facebook (en inglés) fechado el 7 de julio, el presidente destacó la importancia del servicio comunitario policial, que implica que oficiales de policía patrullen un vecindario con el objetivo de conocer a sus residentes. El llamado a una comprensión mayor entre ciudadanos y policía “de ninguna manera contradice nuestro respeto y aprecio por la amplia mayoría de oficiales de policía que ponen sus vidas en peligro para protegernos a los demás cada día”, dijo el presidente.
En 2014, luego de una reunión con jóvenes líderes activistas, Obama formó el Grupo de Trabajo para Tareas Policiales del Siglo XXI (Task Force on 21st Century Policing, en inglés) que agrupa a policías, activistas y líderes comunitarios con la meta de fortalecer las relaciones entre los encargados locales de aplicar la ley y las comunidades que protegen, así como de reducir la delincuencia.
Desde la creación del grupo de trabajo, más de 100 departamentos de policía de los 50 estados han aplicado sus recomendaciones. Se han comprometido con una iniciativa de datos policiales (Police Data Initiative, en inglés) que pondrá a disposición de las comunidades más datos sobre los servicios encargados de aplicar la ley, así como una mejora tecnológica para ayudar a frenar el uso inapropiado de la fuerza e incrementar la rendición de cuentas.
Este artículo está basado en informes de Prensa Asociada.