Estados Unidos observa el Día de la Libertad Religiosa el 16 de enero.
La capacidad de los estadounidenses para orar como les parezca es esencial a su identidad y está consagrada en la Constitución de Estados Unidos.
Estados Unidos también apoya la libertad religiosa en todo el mundo y ha sido anfitrión de la Reunión ministerial para promover la libertad religiosa en los dos años pasados.
“La libertad religiosa no es solo una preocupación cristiana, judía, musulmana, budista, hinduista o humanista”, dijo el secretario de Estado Michael R. Pompeo (en inglés) en la reunión ministerial de 2019. “Es una preocupación de todos”.