
Los atletas olímpicos prestan tanta atención a sus dietas como al resto de su entrenamiento, pero hasta los atletas olímpicos necesitan darse un gusto de vez en cuando.
Para algunos grandes deportistas de Estados Unidos, sus “gustos” son la pizza, el helado y hasta un paquete de galletas Oreo. [Mira el vídeo para ver quién dijo esto]
Pero durante su estancia en la ciudad olímpica de Río de Janeiro, los atletas tendrán opciones más tradicionales y sanas que se servirán en un comedor tan grande como dos campos de fútbol.
Los atletas podrán elegir entre cinco bufés diferentes: brasileño, asiático, internacional, pasta y pizza, y halal y kosher, dependiendo de las necesidades y preferencias alimenticias.
Los atletas coreanos se sentirán como en casa con el kimchi, la famosa col fermentada, con cebollines y verduras surtidas de Corea, que se enviará del país asiático.
En el salón de bufé brasileño, además de platos típicos como arroz, frijoles, farofa (harina de mandioca tostada que suele espolvorearse sobre la comida) y carne, se podrán degustar especialidades regionales y 40 variedades de frutas del país, como castaña de cajú, açai, carambola, guayaba, caqui y maracuyá.

La cocina encargó 4 millones de platos biodegradables para servir hasta 60.000 comidas al día para los atletas que participarán en los Juegos Olímpicos entre el 5 y el 21 de agosto.
Durante los Juegos Paralímpicos del 7 al 18 de septiembre se ofrecerá la misma variedad de alimentos.
Además del comedor comunal, los atletas tendrán la opción de comer en las áreas de entrenamiento preparadas por sus equipos nacionales.
“Confiamos en que nuestra comida brasileña va a ser un éxito”, afirma Marcello Cordeiro, director de alimentación y bebidas de Río. “Estamos haciendo nuestro mayor esfuerzo para que el mundo venga a Brasil.”
Este artículo está basado en informes de Prensa Asociada.