Foto de la izquierda: Personas tomándose una autofoto frente a tulipanes (© Greater Topeka Partnership) Foto de la derecha: Personas caminando con raquetas de nieve en la montaña (© Visit Park City)
Izda.: La cámara de Topeka (Kansas) promociona el festival anual “Binkley Tulip Time” de la ciudad, que atrae a los visitantes para que apoyen a los negocios locales. (© Greater Topeka Partnership) Dcha.: La cámara de Park City (Utah) ayuda a atraer a los turistas, que disfrutan de actividades recreativas como caminar con raquetas de nieve. (© Visit Park City)

La afiliación tiene sus ventajas. Una de las maneras en que las empresas estadounidenses prosperan es uniéndose a las cámaras de comercio locales. Alrededor de 13.000 cámaras representan a empresas locales dentro de comunidades, ciudades, regiones o estados.

Las “cámaras” ofrecen a sus miembros oportunidades de establecer contactos, les ayudan a solicitar subvenciones del gobierno y ejercen presión sobre los legisladores y reguladores para que aprueben leyes o políticas favorables a las empresas. Por su parte, las empresas afiliadas pagan cuotas anuales, que son fijadas por cada cámara local y pueden oscilar de unos cientos de dólares a mucho más.

Muchos de los miembros de las cámaras son pequeñas “empresas de la calle principal”, pero algunos son bastante grandes. En las afueras de Chicago, los 550 miembros de la Cámara de Comercio del Área de Elgin incluyen dos hospitales, un distribuidor internacional de frutos secos, un gran distrito escolar y varias organizaciones de servicios sociales.

“Nuestro cuadro de empresas está formado por empresarios, pequeñas empresas, minoristas, fabricantes, corporaciones locales y el sector sin ánimo de lucro, por supuesto, también”, dijo Carol Gieske, presidenta de la cámara de Elgin. “Esa es la diversidad que resulta tan interesante en nuestra comunidad”.

Amplia vista nocturna de una calle con negocios iluminados en Park City (Utah) (© Arthur Mola/Invision/AP Images)
Calle principal en Park City (Utah), durante el festival de cine Sundance de 2020 (© Arthur Mola/Invision/AP Images)

Park City (Utah) es un ejemplo de cómo una ciudad, sus residentes y sus empresas locales comparten intereses comunes. Formada en 1965, la Cámara de Comercio de Park City, con 1.000 miembros, fue fundamental para el crecimiento de la industria turística y recreativa de la ciudad. En 1981, la cámara se fusionó con el grupo de convenciones y empresas “Convention & Business Bureau” para tener una voz más amplia en la elaboración de la política local, explica Dan Howard, portavoz de la cámara de Park City.

En la actualidad, Park City, una ciudad de 8.000 habitantes, alberga dos grandes estaciones de esquí, el festival internacional de cine de Sundance, 400 millas de rutas de ciclismo y senderismo, la mayor concentración de hoteles de lujo de Utah, fabricantes de equipos de esquí, una industria vinculada al entrenamiento de atletas de talla mundial y mucho más.

Históricamente, la cámara ha colaborado con las autoridades locales para desarrollar campañas publicitarias que atraigan a los turistas. En la actualidad, aboga por un turismo responsable con el medioambiente y por la creación de puestos de trabajo permanentes (en lugar de estacionales) para los residentes locales.

“En realidad se trata de un equilibrio, de la calidad de vida de los lugareños y de tener una buena base de [clientes] para las empresas”, dijo Howard.

Personas sostienen una cinta mientras un hombre y una mujer la cortan con grandes tijeras (© Greater Topeka Partnership)
En Estados Unidos, a pesar de la pandemia, se abrieron 4,3 millones de negocios en 2020. La cámara de Topeka (Kansas), llamada “Greater Topeka Partnership”, recibe uno de ellos, “MB Piland Advertising” en la comunidad con una ceremonia de corte de cinta en su gran inauguración. (© Greater Topeka Partnership)

Fundamento económico

Las cámaras de comercio se remontan a 1599, cuando el término apareció por primera vez en Marsella (Francia). La Cámara de Comercio de Nueva York es la más antigua de Estados Unidos, fundada por comerciantes en 1768 y constituida por el rey Jorge III en 1770.

En la actualidad, la Cámara de Comercio de Estados Unidos (en inglés), fundada en 1912, es la mayor federación empresarial del mundo. Conecta a unas 1.500 cámaras estatales y locales con sus expertos en política, abogados y comunicadores, que se relacionan regularmente con los funcionarios de Washington, según la portavoz Michelle Koepp. La Cámara de Estados Unidos representa a 3 millones de empresas.

Fotografía histórica de hombres sentados frente a un edificio (Biblioteca del Congreso)
La cámara de comercio de Boston en 1896 (Biblioteca del Congreso)

“Las cámaras de comercio de todo el país han sido históricamente los cimientos de la economía estadounidense”, afirma Bob Ross, vicepresidente senior de Greater Topeka Partnership (nombre de la cámara de esa ciudad) en Kansas. “Permiten a las empresas relacionarse entre sí y defender sus propios intereses, y también promueven el bienestar social y la equidad”.

Las cámaras son un ejemplo de la larga lista de organizaciones que apoyan a los empresarios y las empresas en Estados Unidos. Otras son la Federación Nacional de Empresas Independientes, la Cámara de Comercio de Minorías de Estados Unidos y el Centro de Desarrollo Empresarial de la Mujer.