El vicepresidente Biden y el presidente Obama saludan a la multitud (© AP Images)
El presidente Obama y el vicepresidente Biden aceptan la nominación del partido Demócrata en 2012 para presentarse a las elecciones una segunda vez. (© AP Images)

Ahora que está en el último año de su cargo, el presidente Obama bromeaba recientemene diciendo que algunos de sus partidarios quisieran que se quedara. “Le dicen, oh, Barack, ojalá que pudieras presentarte otra vez”, comentó a un grupo en Nueva York (en inglés) en noviembre.

“Pero les expliqué: Primero, es inconstitucional. George Washington estableció un buen ejemplo. Segundo, Michelle no me dejaría, incluso si fuera constitucional. Y tercero, esto no se ha tratado nunca de mi”, dijo.

Todos los presidentes de Estados Unidos menos uno han seguido el ejemplo de Washington y han dejado el poder tras su segundo mandato de cuatro años. La enmienda 22 de la Constitución, ratificada en 1951, ahora prohíbe que nadie sea elegido presidente más de dos veces.

Caricatura muestra a George Washington apuntando con el dedo a modo de reproche a Teodoro Roosevelt (Archivos Nacionales)
Una caricatura política de 1912 muestra al fantasma del presidente George Washington intentando desanimar al expresidente Teodoro Roosevelt de presentarse a una elección presidencial por tercera vez. (Archivos Nacionales)

Algunos no están de acuerdo con los límites del mandato. Su argumento es que los votantes deberían poder retener al presidente si les gusta. También dicen que los límites al término del mandato debilitan el segundo mandato de los presidentes, convirtiéndolos en ineficaces, lo que en Estados Unidos se califica de “lame duck” (un pato que cojea).

Sin embargo, el límite al término del mandato anima a que haya nuevos candidatos con ideas nuevas y salva de que se instaure la noción de que un líder dado es indispensable. Los que defienden la limitación argumentan que la presidencia es un empleo y no una carrera.

Thomas Cronin (en inglés), un profesor en el Colegio Universitario de Colorado experto en temas presidenciales dice: “La enmienda 22 [que impone límite al mandato presidencial] es un compromiso práctico aunque imperfecto entre la necesidad de que en la presidencia haya energía, capacidad de decisión y liderazo y el principio de rotación en los cargos de una república”.

Dos tercios de los estadounidenses apoyan la enmienda 22 y los límites al término de mandatos presidenciales. “La mayoría de los estadounidenses entienden que los límites a los términos son el precio de la protección de la libertad”, comentó Cronin.

Gráfico que dice “Elecciones 2016” (Depto. de Estado/J. Maruszewski)