Aunque estén separados tan solo por 140 kilómetros de agua, Estados Unidos y Cuba han tenido una relación distante durante más de medio siglo. En 2015 los dos países empezaron a trazar un nuevo curso. Desde el principio ambos acordaron gestionar su agenda por medio de una comisión bilateral.

El restablecimiento de relaciones diplomáticas con Cuba permite a Estados Unidos representar con mayor eficacia sus intereses y valores. El futuro de Cuba lo deben decidir los ciudadanos cubanos. Estados Unidos considera que Cuba debería ser pacífica, próspera y democrática.


Estados Unidos y Cuba trabajan conjuntamente para proteger el medioambiente y salvaguardar frágiles zonas marinas protegidas. Los dos países firmaron una declaración conjunta para la cooperación en materia de protección ambiental y un memorando en noviembre de 2015 que establecen una relación a largo plazo y de cooperación para las zonas marinas protegidas existentes entre Cuba, Florida y el golfo de México.

Aunque la mayoría de las empresas en Cuba todavía son dirigidas por el Estado, existe un pequeño sector privado que va en aumento. La administración Obama ha tomado varias medidas en el marco de su autoridad ejecutiva para reducir las restricciones a ciertos viajes, comercio y transacciones financieras aplicables a Cuba. Los cuatro aspectos de cambios regulatorios en los últimos 19 meses han hecho que sea más fácil participar con los cubanos para las personas en Estados Unidos, así como proporcionar recursos y compartir información que puede ayudar a que el sector privado de Cuba continúe aumentando.

Nuevos reglamentos del Departamento del Tesoro de Estados Unidos ayudan a las familias en Estados Unidos a enviar efectivo a sus familiares en Cuba. El correo directo, una de las claves para aumentar los lazos sociales y comerciales entre los dos vecinos se reanudó el 16 de marzo de 2016, tras una interrupción de 53 años.
El 10 de junio el Departamento de Transporte aprobó la solicitud de seis aerolíneas estadounidenses para programar vuelos entre cinco ciudades estadounidenses y nueve ciudades cubanas (sin incluir La Habana), los cuales empezarán este otoño. El 7 de julio ese Departamento emitió una propuesta para que ocho aerolíneas de Estados Unidos empiecen un servicio programado de vuelos entre La Habana y diez ciudades estadounidenses. Más adelante este verano se espera que se produzca la decisión final sobre las rutas a La Habana.
En su discurso del 22 de marzo el presidente Obama subrayó la manera en que la reconciliación de los cubanos en ambos lados del estrecho de Florida es fundamental para el futuro de Cuba.


La visita del presidente Obama en marzo demostró el compromiso de Estados Unidos con la normalización de las relaciones con Cuba. Mientras estaba allí, Obama habló directamente al pueblo cubano sobre el apoyo continuado a una Cuba pacífica, próspera y democrática..

Tras aterrizar en Cuba, Obama escribió en el correo electrónico de la Casa Blanca: “Ser el primer presidente de Estados Unidos en casi 90 años que visita un país y un pueblo que apenas están a 90 millas (140 kilómetros) de nuestra costa me hace sentir humilde”. El último presidente de Estados Unidos en visitar Cuba fue Calvin Coolidge en 1928.