Durante 2.000 años el agua fluyó de tres depósitos masivos desde el sur de Belén hasta el centro de Jerusalén. En la actualidad, estos embalses de Salomón se encuentran sin actividad, ruinas de una maravilla de la ingeniería. Pero un proyecto de Estados Unidos pretende revitalizar los embalses y convertirlos en un sitio turístico de Cisjordania.
“El proyecto es algo más que solo proteger la historia”, expresó el cónsul general de Estados Unidos, Donald Blome, durante un evento en octubre para lanzar el proyecto de conservación. “Se trata de proteger la vida y los medios de sustento de las personas que viven hoy aquí”.
Actualmente solo uno de los embalses está lleno. Una subvención de 750.000 dólares del Departamento de Estado de Estados Unidos y el consulado llevaría al antiguo sistema de agua a su antiguo esplendor. Los fondos serán destinados para realizar reparaciones de emergencia, proteger los canales entre los embalses y crear senderos seguros para que los visitantes caminen.
La historia fluye en lo hondo de los embalses de Salomón. Si bien el nombre se refiere al bíblico rey Salomón, la primera piscina se construyó probablemente en el primero o segundo siglo a.C. durante el período del Segundo Templo de Jerusalén. En el siglo XVII, un fuerte otomano en el depósito protegía el suministro de agua de la ciudad. También fue una parada para repostar en la ruta del peregrinaje “hajj” a La Meca en Arabia Saudita. La mayoría de los fondos para el proyecto de conservación provienen del Fondo de los Embajadores para la Preservación Cultural.
“Compartimos la esperanza de que este sitio sea una razón de orgullo, esperanza y descubrimiento para personas de todas las culturas, religiones y orígenes. Los lugares que tienen este tipo de antigüedad deben estimularnos e inspirarnos a todos a unirnos y celebrar su belleza “, señaló Blome.
Renacer de los embalses

La restauración de los embalses podría ayudar a las comunidades palestinas de la zona a prosperar. La potenciación económica de los palestinos es un pilar del apoyo de Estados Unidos para las conversaciones de paz entre Israel y la Autoridad Palestina.
El agua siempre ha sido parte de la historia humana para los residentes de las áridas colinas alrededor de Jerusalén. Los embalses son un monumento, un tributo a esa historia. “Es nuestro deber protegerlos y restaurarlos”, dijo George Bassous, gerente general de los embalses de Salomón.